Un vino irrepetible,
fruto de una historia incomparable
Nuestros vinos nacen en la viña. Ahí es donde realmente adquieren su personalidad. La del terruño, la del paisaje
Los viñedos se componen de 55 hectáreas propias, situados en el término municipal de Chinchón.
Cultivados en secano y en la vega del Tajuña, las cepas centenarias que componen nuestras viñas pueden presumir de ser de las más antiguas de la Comunidad de Madrid, otorgándonos una producción limitada, pero una calidad inmejorable, Sus variedades son Tempranillo, Tinto Fino, Airén y Malvar Los viñedos, en su totalidad ecológicos, se trabajan de manera manual, buscando un tipo de cultivo respetuoso con la tierra, para obtener unos vinos realmente fieles a su terroir.
V endimia
La uva se recoge manualmente en cajas de 20 kg, seleccionando en la propia viña los racimos que estén en su punto óptimo de maduración, llegando a la bodega en perfecto estado para su posterior elaboración.
Este proceso es supervisado por el enólogo de la bodega para verificar la calidad los racimos vendimiados.
La vendimia se hace siempre al amanecer para que las uvas mantengan la frescura del comienzo de un nuevo día y así llegar a la bodega con el grado de humedad y temperatura correcta.
E laboración
Las tinajas son nuestra seña de identidad y se han estado usando a lo largo de la historia para elaborar vino. Es un material que favorece el intercambio de oxígeno a través de los poros del barro, lo que facilita que el vino sea más franco y muestre todos sus aromas.
La tinaja, además, actúa como aislante térmico, permitiendo retrasar la fermentación y que todo se haga más despacio, favoreciendo la presencia de la fruta..
E nvejecimiento
Tanto robles, como crianzas, se envejecen en barricas de roble francés y americano de diferentes tonelerías y tostados.
La Bodega elabora sus vinos bajo la Denominación de Origen de Vinos de Madrid que ha logrado numerosos premios y distinciones.